El tiempo pasa velozmente, ¡cuidado!

Hola, Luiri los saluda muy calurosamente otra vez.

Junio llegó más rápido que volando, y se va sin pausa, la verdad es que los días están pasando con más velocidad sin que muchos se den cuenta. Este cumpleaños ha sido diferente, con cosas muy buenas y hermosas, pero con otras que sinceramente me han hecho pensar mucho.

Cuando eres “joven” y aún no llegas a la base tres, muchas veces desgastamos el poco tiempo que la vida nos otorga haciendo cosas sin importancia. A veces uno sin querer se retrasa y las personas te dicen “normal”, no pasa nada; yo no lo creo.

Personalmente a mi me asusta un poco el paso del tiempo, digo “Asu, ya cumplí 22 y comienzo a preguntarme, “¿ahora qué?, ¿qué he terminado?”. No sé si es porque las personas tienen grandes expectativas o porque yo soy el que en realidad las tiene, aspiro muchas cosas, algunas de éstas demasiado vanidosas y pretenciosas. Pero ¿quién no desea cumplir sus sueños, conseguir el éxito y grandezas?

Éxito, un término que varía según la perspectiva, cambia de persona en persona; creo que es una de las palabras más variables, casi o más que “la felicidad” y la “belleza”; ya que para muchos poco es demasiado y demasiado … es poco.

Grandes aspiraciones uno tiene, quiero ser grande uno dice, quiero ser millonario, dice otro. Sin embargo, ¿cómo lo logramos? ¿Cómo transformamos lo que somos ahora en esas grandes personalidades?

La respuesta no es clara, ni mucho menos sencilla. Lo único que sí  se sabe es que el esfuerzo, la dedicación y sobretodo la disciplina, son factores determinantes para conseguir lo que queremos. 

Pero, cómo conseguimos eso si ni siquiera tenemos claro lo que deseamos; piensen en ello, anhelamos cosas que no tenemos claras, que no definimos correctamente y eso lamentablemente, nos hace caminar en círculos, perdernos sin poder encontrar el camino o el sendero correcto.

Nos vemos en la siguiente nota. Los quiero mucho. No duden en dejarme sus comentarios y compartir.