Recuerdo haberle dicho que se cuide mucho y agradecerle, mientras intentaba abrazarlo y no caer en mi estúpido impulso de demostrarle cariño o algo que se le pareciera. Y así se fue, se fue con un “me encantaría volverte a ver”, perdido en mis labios, lo vi pasar desde el balcón de la habitación dirigiéndoseSigue leyendo «Volátil como la arena y el mar»